sábado, 9 de febrero de 2008

DOS EN UNO



En una vida compartida, de momentos, de seres, de experiencias, de nuevos árboles y flores, de un viento que se renueva, de un viento que me alza las pestañas, que sacude la palmera. Miro a través del orificio del tiempo, pudiendo respirar con mayor tranquilidad.

Entre las manos la balanza, y un sentimiento de horizonte, de generar rosas en las mañanas y llevarme siempre uvas en la noche.

Fue dura la batalla y aún estoy en ella, guardo reposo junto a un río como la leona de un sueño, como un anhelo de infancia, como un campo.